LA EXISTENCIA EN EL MÁS ALLÁ

En pleno siglo XXI, continúa existiendo mucha inquietud entre la gente acerca de lo que sucede después de la muerte.

La mayoría de las personas, durante la etapa de la juventud,  consideramos la muerte como un concepto ajeno y lejano, mientras que en la edad avanzada, empezamos a pensar en la muerte más seriamente. Todos sabemos muy bien que tenemos una “fecha de caducidad”, que nuestro cuerpo acelerado y gastado llegará a no funcionar más algún día.

            El hecho es que en algún momento no tendremos un cuerpo físico. A la mayoría de nosotros nos resulta atemorizante el hecho de pensar que no tendremos “vida”. Primero que nada, creo firmemente que no existe una “muerte”, bueno sólo en un determinado caso del cual escribiré en un futuro cercano en otro artículo.  En lugar de decir “morir” diremos que abandonamos el cuerpo que ya está gastado, nos convertimos entonces en espíritus y regresamos al Más Allá. En verdad no morimos sólo abandonamos la materia. Esto nos llega a ocurrir a todos sin excepción en un determinado momento.E

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            Todos estamos relacionados con la idea que existe un mundo material y algo en el “más allá”, el cual es sólo un lugar más cuya ubicación exacta no la conoce ni siquiera el científico más reconocido. En primer lugar porque los pseudocientíficos están limitados por su método científico, que no les permite indagar estas cuestiones, y en segunda porque no existe ningún instrumento que pudiera medir, captar o identificar dónde se encuentra este Más Allá. Valiéndose de ello muchos pseudocientíficos simplemente afirman torpemente que no existe ningún mundo de los espíritus, es decir responden con la frase típica: no lo veo, no creo. La mentalidad de bastantes científicos es ridícula, su frustración debe ser tan grande que simplemente lo niegan una y otra vez. Como niños caprichudos, no quieren entender o bien reciben grandes cantidades de dinero para difundir la falsa idea que no hay vida después de la muerte, con el único fin de atormentar la mente de los seres humanos.

Sin embargo, los físicos modernos aportan teorías acerca de la existencia de diversas dimensiones. Estando atrapados en nuestra dimensión, no nos podemos mover a otra, esto es muy cierto. Es decir que con este cuerpo pesado que poseemos no nos podemos desplazar a otra dimensión porque nuestras leyes física no lo permiten y no tiene ningún sentido tratar de hacerlo.

Es necesario reconocer que la existencia de seres es tan amplia e inimaginable para nosotros, que resulta difícil de aceptar. Pensemos en la cantidad de seres tan extensa que hay tan sólo en nuestro Planeta, en un mundo material, además del ser humano. Distintas especies de animales y plantas, se continúan descubriendo y catalogando. De manera similar, existen seres que no poseen un cuerpo físico, y podemos decir que son seres que habitan en otras dimensiones, y sí pueden pasar a la nuestra, aunque nosotros no seamos capaces de percibirlos de la misma manera que percibimos la materia densa, es decir lo que nos rodea. Aparentemente no tenemos acceso a ninguna otra dimensión; efectivamente, nuestro cuerpo no tiene ningún acceso, pero tales seres de otras dimensiones pueden “llegar” a la nuestra y son capaces de transmitirnos mensajes. Tales mensajes pueden ser recibidos por medio de la mente de ciertas personas; tales personas vienen siendo las que conocemos con el nombre de médiums. Sencillamente así está establecido, ¿por quién?, sin duda alguna por Dios Padre, el Ser Omnipotente cuya existencia no cabe en la mente de mucha gente.

Incluso en Internet, nos encontramos con interesantes vídeos en los que se han captado fantasmas, sombras, luces, cosas que “se mueven solas”, portales dimensionales, etc., existen tantos testimonios de experiencias después de la muerte… Son fenómenos que han sido registrados y están ahí como prueba de que hay algo más que no somos capaces de entender. De hecho todos hemos escuchado alguna vez historias de “fantasmas”, o historias de personas que han experimentado circunstancias ajenas a la realidad diaria.

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Ya no es tiempo de dudar en la existencia del Más Allá, de esa otra dimensión que sencillamente se llama –el Mundo Espiritual–, y que en él existe una cantidad inimaginable de seres. Es un Mundo increíblemente enorme para nosotros. Dicho Mundo tiene nombres, niveles, categorías, etc. Es un Mundo TAN VERDADERO como lo es el nuestro. El hecho de que no lo podamos percibir con nuestros sentidos, no quiere decir que no exista. Obviamente nuestros sentidos están diseñados para captar sólo la dimensión en la que nos desenvolvemos. Aunque entrenando nuestra mente todos podríamos conectarnos con las otras dimensiones.

 Los fantasmas y otros seres, sí existen, claro que sí, pero con calma, esto no significa que debamos alarmarnos, asustarnos y vivir atemorizados cuando nos envuelve la oscura noche. Nada de esto. En realidad el temor, el miedo o pánico ante todo esto, es producto de una muy mala intencionada publicidad por parte de personas que por medio de la televisión o incluso de internet, a través de libros o revistas, películas, etc., y con un enfoque alarmista, pretenden ganar más público y… dinero, la falsa meta.

Así que, resulta en vano negar la existencia de un Mundo Espiritual, sólo porque nos asusta esta idea. No debemos temer, hay que averiguar y comprender. Todo esto sólo es parte del conocimiento que se nos ha ocultado. Hay que vivir, no con temor sino con amor.

Poco a poco iremos escribiendo muchos más artículos a lo largo de este Espacio Digital y explicaremos por qué no debemos temer a lo que no vemos.

Para saber más: http://misjafaraon.com/spanish/wyszukiwarka/?fraza=niveles