lunes, 18 de mayo de 2020

LA MAGIA DE LOS ICOSAEDROS Parte 1


        El Icosaedro es un poliedro que ya se conocía desde la antigüedad. El Ashmolean Museum de Oxford posee una colección de sólidos regulares neolíticos con una fecha estimada de 2000 a.C. Entre estas figuras, se encuentra precisamente el icosaedro, el cual formó parte de los denominados sólidos Platónicos. (Fuente: Wikipedia).
Sólidos regulares neolíticos de Escocia (2000a.C)(Ashmolean Museum de Oxford).Fuente: http://www.bdigital.unal.edu.co/4949/1/GloriaJudithFl%C3%B3rez.2011.pdf

El Icosaedro, entre otros poliedros, así como la más generalmente conocida Pirámide de Keops, es una de las estructuras que posee mucho poder energético. Este tipo de figuras geométricas contienen la proporción aurea φ (phi), que se presenta en distintas formas de la Naturaleza, formando parte así de la denominada –Geometría Divina–.

Sin embargo, ¿por qué si un cuerpo geométrico tiene tanta energía, no es aprovechado y es muy poco conocido? La respuesta puede ser muy sencilla y a la vez complicada. Un cuerpo geométrico como el dodecaedro o bien la Pirámide de Keops, tienen mucho poder energético, eso es verdad. A la vez este tipo de energía, es un tipo de –Energía Sutil–. El hecho de que se denomine –Energía Sutil–, no quiere decir que sean energías débiles sin poder alguno, al contrario este tipo de energías son las más poderosas y más importantes para nuestras células y por lo tanto para nuestros organismos.
Imagen fuente: supercurioso.com

Se sabe que este tipo de Energías Sutiles no son ampliamente investigadas como se debería, la razón tal vez sea en parte porque no se cuenta con un equipo especial con el puedan ser medidas. Hasta ahora no hay instrumentos que nos indiquen por medio de una aguja, un contador o bien digitalice de alguna manera qué tanta Energía Sutil podría generar un organismo vivo, que es una de las principales fuentes. No obstante sí podemos sentir, percibir y notar los efectos de esta Energía.


Cada organismo vivo es capaz de percibirlas. Respecto a las personas, hay quienes sienten más este tipo de energía que otras. Uno de los más conocidos ejemplos de quienes perciben estas energías son los radiestesistas o también llamados o zahoríes, al igual que los Sanadores.

La Energía Sutil limpia, ordenada es la que proviene del Cosmos, y ésta a su vez viene de la Fuente Divina Mayor, que es la de nuestro Padre Yahvé y la de sus Colaboradores.  Este tipo de Energía es fundamental, indispensable y sumamente importante para mantener el estado saludable de nuestros organismos.

Por supuesto que uno de los mejores ejemplos de Energía Sutil, es la Energía del Amor, de ahí que nuestro Amado Maestro Jesús nos invitaba constantemente a vivir en Amor. Las energías sutiles de alta vibración, las limpias, son las más poderosas, las que se captan también en la meditación, y por lo tanto las que nos ayudan a que el cerebro logre el estado alfa, es decir a las frecuencias alfa.

Aquí que sean las Energías más poderosas no significa que sean las más potentes que registran nuestros instrumentos, los que utilizamos con frecuencia en el mundo material. Como mencioné no hay equipos de medición para ello.

Antes de entrar de lleno a hablar sobre el Icosaedro, tocaremos un poco el tema de las propiedades energéticas de la Pirámide de Keops, ya que es el poliedro mayormente conocido con el que muchas personas han logrado valiosas experiencias.

La Geometría Divina cuenta con maravillosos transductores –si se le pudiera llamar así– de la Energía del Cosmos. Y tenemos el más conocido que es la Pirámide de Keops. No es casualidad que los Constructores de la Gran Pirámide hayan elegido éste maravilloso poliedro como concentrador de Energía Cósmica, de ningún modo fueron hechas como tumbas ni para conservar cuerpos muertos o algo por el estilo.
GEOMETRIA DIVINA Imagen: Pinterest.com


En Internet es posible encontrar mucha información en páginas digitales, youtube u otras plataformas, acerca de distintos experimentos realizados con la Pirámide de Keops, que incluyen la conservación de alimentos; afilar navajas; como ayudante en la meditación, en la sanación; mejora el crecimiento de las plantas; ayudar a dormir mejor etc…

Una de las personas que se ha convencido de las fuerzas energéticas de la Pirámide de Keops es el investigador ucraniano Alexander Golod, quien con toda razón, defiende la idea de que este cuerpo geométrico trae beneficios tanto para el ser humano como para el medio ambiente, y ha construido más de veinte pirámides de fibra de vidrio y otros materiales en Rusia, una de ella tiene la altura de unos 44 metros con un peso aproximado de 55 toneladas. (Fuente: Wikipedia https://en.wikipedia.org/wiki/Alexander_Golod).

¿Y cómo es posible esto? ¿Cómo es posible que la energía se concentre ahí y después salga? Es muy probable que esto tenga que ver con las partículas subatómicas o sub-partículas (recordemos que los científicos actuales desconocen mucho en este campo todavía), y sin duda tiene que ver con los vértices de la figura, como lo menciona el Protector de la Tierra (sesión 298). Pensemos en lo que sucede cuando un zahorí encuentra agua. Las simples ramas secas son atraídas hacia abajo, y una vara larga es capaz de oscilar con tal fuerza que puede ser arrancada de la mano del que la maneja. Y estamos hablando aquí principalmente sólo de la fuerza de iones positivos.
Imagen: youtube.com Buscando aguas subterráneas (min14:33)


Personalmente, en un terreno en Polonia, tuve la oportunidad de experimentar la percepción de esta energía iónica, como lo hace un zahorí cuando utiliza las varillas para detectar corrientes de agua subterránea. Me ha encantado esta experiencia, las varillas claramente se separan o se unen, o se siente el “jalón” hacia abajo de las varas secas, es increíble y maravilloso a la vez. Por eso me fascina la Física, ¡es toda una materia de magia!

Regresando a las pirámides, no hemos tenido la ocasión de hacer una en casa, ni siquiera una pequeña, pero sigue vigente en los planes futuros. En cambio, lo que sí hemos hecho, es el Icosaedro y hemos experimentado sus efectos muy positivos y favorables. 
(Continúa. Leer Parte 2).

Uno de nuestros Icosaedros

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