Las señales de
los Últimos Tiempos no dejan de presentarse, ya están ocurriendo cada vez con
mayor frecuencia. Es posible observar señales tanto en el cielo diurno como en el
cielo nocturno, también en los campos de trigo, en el comportamiento de la
Naturaleza en cualquier parte del mundo. Con todo lo que sucede ya todos deberíamos
estar muy convencidos de que algo realmente importante está sucediendo. Algunas
personas ya han tomado conciencia de lo que está pasando, y cuando se están
dando cuenta que muchos seres humanos se están yendo del mundo, acertadamente se
han puesto a reflexionar acerca del sentido que le están dando a su vida. Y precisamente
por esa actitud que han tomado de reflexión, ya en los momentos de silencio, tales
personas intuyen -Quién- nos está tratando de comunicar algo.
Hay muchas
cosas que ya se están dirigiendo hacia un gran cambio. Por supuesto que no se
trata del absurdo orden o más bien des-“orden” mundial que han estado tramando los
grupos que oprimen a la humanidad. Es necesario que mantengamos en mente que sólo
la Instancia Superior siempre tiene la última palabra decisiva sobre lo
que va a suceder con la humanidad.
Todo el escenario
mundial actual que estamos percibiendo ya no es tan ajeno para todos nosotros,
porque ya se había profetizado. Un Ser Espiritual de alta jerarquía celestial,
con el permiso de Dios Padre, desde el año 2001, ya nos estaba advirtiendo -una
vez más- todo lo que está pasando ahora, y por supuesto nos comunicó qué hacer
para protegernos. Sin embargo para bastantes seres humanos, las advertencias de
lo Alto, no han tenido y siguen sin tener un mayor significado. Demasiadas
personas siguen comportándose de tal manera que no les interesa el bienestar de
otra persona, tampoco les interesa lo que es la fe, la honestidad y otros
valores humanos. Y lo que es peor, tales personas han estado depositando toda
su confianza en objetos inertes, como es el claro caso del dinero.
Es un hecho
que desde hace más de dos mil años el Consejo de los Dioses habían tomado la
decisión de –eliminar a los seres humanos–. Sin embargo los Seres Superiores que
aman esta obra llamada raza humana, se opusieron. Así que todo este tiempo, ha
sido un tiempo -extra- que fue otorgado por nuestro Padre, ha sido un tiempo
–regalado– que ya se ha terminado, los dos mil años se han terminado. Con
ello también ya debería haber terminado nuestra historia junto con la mala
decisión de no haber querido aprovechar y aprender las enseñanzas
que nuestro Amado Maestro Jesús nos entregó durante su –vida–.
Durante aquellos
dos mil años, a la humanidad se le dejó actuar sola y estuvimos todo el tiempo bajo
atenta observación. En el transcurso de ese tiempo los corazones humanos decidieron
con toda alevosía, hacer poco a poco a un lado a nuestro Dios Padre Yahvé. El
ser humano permitió cultivar en su corazón, un enorme ego y creyó que él solo
con su “inteligencia”, que por supuesto es limitada, bastaría para saber administrar
y manejar este mundo. El ego en el ser humano se ha dejado ver cuando a éste se
le ocurrió pensar que no necesita a Dios, o peor aún, que ¡Él no existe!, pensó
también que cada persona es capaz de salir adelante en la vida basándose sólo
en su propio esfuerzo diario.
Así que las graves
consecuencias y el resultado del mal manejo de la razón y de la libre
voluntad, es todo lo que estamos viendo ahora en cualquier sector de las
sociedades que conforman este mundo: guerras, conflictos, enfermedades,
contaminación… En el tiempo que vivimos el concepto de miedo, ansiedad,
enfermedad crece en muchas mentes humanas que se han vuelto agitadas y descontroladas.
Y precisamente este es el resultado de lo que el ser humano ha elegido por
sí mismo, cuando en su vida decidió hacer a un lado al Padre Supremo.
¿Sirvió de
algo pensar que Dios Padre es un Ser allá en lo alto, a quien sólo se le debe rezar
pero en realidad la confianza en Él y el cumplimiento de sus leyes
no tienen nada que ver en la vida diaria?
Todas estas palabras
pueden tener un sabor amargo, pero no es amargo para el que ha conocido lo que
significa la –confianza en el Padre–, es decir lo que es la fe.
A pesar de que
el tiempo de dos mil años se ha acabado, todavía por la misericordia de Dios,
la cual es inmensa, y por la intercesión de los Seres Espirituales a
quienes les interesa el destino de la raza humana, nuestro Padre nos ha
concedido -otros- mil años más. Sin embargo primero debe haber una selección
de seres humanos quienes van a poder aprovechar este tiempo concedido, y a este
proceso se le llama la Limpieza de la Tierra y es lo que está pasando ahora.
¿Tendremos –todos–
la oportunidad de aprovechar este tiempo todavía agregado para mejorar
espiritualmente por medio de la reencarnación? ¿Quiénes van a poder aprovechar
este tiempo venidero?
Las
advertencias casi se han agotado, y al parecer lo que sucede todavía no tiene
un significado mayor para un gran número de personas. ¡Es una gran lástima!
Los ya casi mil
años venideros son la más última oportunidad, pero será un tiempo concedido ya sólo
para algunos seres humanos quienes podrán continuar su avance espiritual a través
de las reencarnaciones, ya que muchos otros -con sus acciones- están decidiendo
perder la oportunidad de avanzar y peor aún muchísimos ya están perdiendo la
propia –existencia del espíritu–.
¡¡La falta de
introspección y arrepentimiento es algo bastante serio, puede provocar que el
espíritu determinado después de abandonar el cuerpo, ya deje de existir!!
Cada
día es un milagro, un gran regalo, una gran oportunidad recibida por
nuestro Amado Padre. Si vivimos cada día como el aquí y ahora, respetando las
leyes divinas y confiando plenamente que en nuestra labor diaria recibiremos
ayuda de lo alto, estaremos aprovechando al máximo los determinados números de
años de vida aquí en la Tierra para realizar un buen avance en el campo
espiritual.
Cada uno de
nosotros sólo está llevando a cabo el muy corto viaje en la Gran Escuela de la
Vida. El tiempo se está acabando así como las advertencias y cada uno de
nosotros ya está eligiendo el destino que le va a conceder a su propio espíritu.
http://misjafaraon.com/spanish/sesion-1/
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
GRACIAS POR PARTICIPAR.